tiuq i semitemos
Me pregunto si puedo aprender del vacío, si soy capaz de distorsionar una realidad inventada.
Por lo general la renuncia me resulta una tentación e invento miles de estrategias inexpugnables para la desidia.
Invariablemente cedo y en ese punto mi único refugio se vuelve musical y nada puede sacarme de la inmensidad sonora. Me sumerjo en mi oscuridad, nadie puede verme.
Pero también, cada determinado tiempo robo una bicicleta en un sueño y vuelvo a ver como se bifurca el camino justo delante de mis ojos.
Será que la fantasía tiene también equilibrio. ¿Quién sabe?
Por lo general la renuncia me resulta una tentación e invento miles de estrategias inexpugnables para la desidia.
Invariablemente cedo y en ese punto mi único refugio se vuelve musical y nada puede sacarme de la inmensidad sonora. Me sumerjo en mi oscuridad, nadie puede verme.
Pero también, cada determinado tiempo robo una bicicleta en un sueño y vuelvo a ver como se bifurca el camino justo delante de mis ojos.
Será que la fantasía tiene también equilibrio. ¿Quién sabe?